sábado, 20 de marzo de 2010

RÉVÜLÉSSEL RÉVÜLÖK

Todo lo que ha visto la Luna:
sufrientes torrentes que se olvidan,
cayendo se queman en las honduras.
Refulgen sus últimos guiños
tras la corteza anciana y cálida de la tierra dormida,
paciente, imperturbable abuela de los ciervos.

Circula como arroyos ciegos y cansados
en el jugo de las bayas, en el líquido espinal,
a través de las flautas de las zarzas.
Las espinas del Sol lloran tdos los nombres,
se detienen silbando en las madrigueras
y en los vientres de las lobas,
coronando el musgo de hojarasca,
devolviendo el alado fuego a las charcas inundadas,
al barro generoso,
a la eterna mirada que vuela por el bosque.


















Imagen por Agnes Toth

2 comentarios:

  1. Qué típico es enamorarse y relegar en cierto modo la creatividad en favor de la felicidad pasiva; el intercambio de la producción por la mera recepción :)
    espero que sigas bien, Ceci!!! Hablamos pronto. Muchos besos :)

    Ali

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  2. Hey, hey, una cosa es que escriba, cante y dibuje y otra muy distinta colgarlo en internet. Y felicidad a-mar(es), por activa y por pasiva :))) Espero que tú también la tengas.

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